ALGUNAS REFLEXIONES SOBRE LA MASONERÍA Y EL PRIMER GRADO

 

R:.H:. Felipe Injoque Espinoza M:.M:.

26 de mayo 2005, cuando era V:.M:. de la R:.L:.S:. Hiram de Tiro N° 13 y vuelto a leer el 06 de julio 2020

 

A:.L:.G:.D:.G:.A:.D:.U:.

 

ALGUNAS REFLEXIONES SOBRE LA MASONERÍA Y EL PRIMER GRADO

 

La masonería, como escuela iniciática, es una expresión del anhelo o aspiración natural de superación del ser del plano físico, ilusorio e intrascendente donde uno está al plano real, trascendente y espiritual, donde uno ES.

Se dice que es un sistema que se expresa en símbolos y en el que alegorías velan verdades a los ojos del que no puede o no sabe VER lo REAL y TRASCENDENTE. Ello es debido a que al ser un sistema iniciático, porta el conocimiento milenario del hombre, el cual no puede entenderse sin un proceso INICIATICO. Proceso este que permite al iniciado avanzar, siguiendo un sendero estrecho signado por un descubrir las verdades poco a poco. En este trance al mismo tiempo las verdades descubiertas vuelven a ser secretos, debido a lo imposible que resulta el comunicarlo al resto. Por ello y debido a la frágil memoria social del ser humano, al egoísmo y a los vicios que en la historia han agredido al conocimiento para beneficio de unos pocos, se hizo necesario el secreto. Este secreto que en algunas épocas se convierte en necesidad, es en concreto una realidad tan natural como la que se produce cuando uno estudia una profesión y alcanza el conocimiento que solo otro profesional puede alcanzar por un proceso similar de formación y esfuerzo. Sin embargo la sociedad iguala las condiciones del que conoce y del que no conoce, con el riesgo constante de que el que no conoce crea conocer y tome por la fuerza lo que él cree Conocimiento y destruya o mal utilice esta información. Por ello, los símbolos velan y las alegorías esconden estas verdades, para que solo el que está preparado las entienda y les dé el verdadero valor en su proceso de aprendizaje.

De alguna manera la masonería sintetiza conceptos filosóficos y religiosos, mágicos y científicos, reflejando leyes y principios en forma aparentemente expresa, sin embargo, oculta a la primera vista. Como sistema complejo y gradual, se expresa en símbolos, alegorías y rituales operativos que de grado en grado confieren, al que se esfuerza, conocimientos y verdades trascendentes.

En el grado de aprendiz, o primer grado, se dice que está encerrada toda la sabiduría de la masonería. Sin embargo, el aprendiz llega a él luego de una ceremonia en la que es encerrado simbólicamente en el vientre de la madre tierra.  Es luego expuesto al aire como semilla que germina, en el primer viaje, donde recibe los azotes de ventiscas derivadas de los vicios. Luego se establece y nivela al llegar al agua purificadora que le indica el camino del control emocional, para luego llegar a la purificación por el fuego, que representa el desarrollo del fuego interior, de la conciencia que más tarde le hablará con claridad. Ha pasado por los cuatro elementos de la creación, para luego elevarse al pasar la prueba de la sangre y finalmente se interna en sí mismo al llegar a la prueba de la caridad, formando una figura que recordaremos más adelante. Partiendo de un cuadrado material, encuentra la existencia eterna de su triángulo espiritual. Aprende que su materialidad polarizada solo puede ser controlada por el espíritu impar. Encontrando ese punto que le permite crear el triángulo y que representa su triángulo radiante interior. Estas alegorías las veremos también más adelante en nuestro andar. Mientras, es necesario abrir los ojos y los oídos para mirar la realidad y escuchar la verdad.

Como podemos apreciar en el grado de aprendiz, se tiene una serie de símbolos y arreglos en el templo; se tiene un ritual operante, se tiene una plancha de trazar (especialmente utilizada en el rito de York) y un conjunto de signos, tocamientos y palabra, que nos remarcan el trabajo del aprendiz. Es el primer escalón en un camino gradual, pero que encierra como una semilla, el camino completo de la evolución a la que aspiramos.

En el cuarto de reflexiones encontramos la oscuridad. Esta oscuridad solo es rasgada por la flama de una vela que nos permite ver por breves momentos. Cuando nos quitan la venda con la que entramos, se hacen visibles algunos mensajes y símbolos de despojos humanos, pan enmohecido, azufre, sal, mercurio y un reloj de arena.  Nos hacen reflexionar en el nuevo nacimiento a partir de un vientre terrestre, con una serie de avisos que previenen al curioso malintencionado, al vano al hipócrita, invitando al estudioso al curioso de aprender y de elevarse. Nos enseñan los elementos simbólicos y esotéricos que debemos trabajar para transmutarnos en la alquimia espiritual del iniciado.

La ceremonia de iniciación nos muestra un camino signado por pruebas y viajes, así como por un juramento que nos liga a la masonería. Pero nos inicia en el camino del conocimiento que no puede revelarse sin esfuerzo al profano. Este representa al ignorante que no se esfuerza en superarse espiritualmente. Primero somos interrogados sobre nuestras convicciones, paso previo necesario para evitar el ingreso de candidatos no preparados, los que serán incapaces de entender. Se nos hace conocer los objetivos de la masonería y se nos pide confirmar nuestro interés en pertenecer a ella.

Luego se nos hace viajar simbólicamente. En la cámara de reflexiones estuvimos en la prueba de la tierra. En los viajes sucesivamente superaremos simbólicamente las pruebas del aire, del agua y del fuego, que completaran el cuaternario material. En ellos también se encierra el camino que nos espera en la orden para poder avanzar. El iniciado debe transmutar haciendo que su espíritu se ponga por encima del cuerpo, es decir debe hacerse consciente y dirigir su vida en el sentido de la virtud. Por ello luego se nos somete a la prueba de la sangre y la de la fraternidad, que completan el punto mágico que genera la figura triangular del espíritu sobre la materia y que se refleja en el mandil pentagonal.

 

Finalmente, se nos muestra el templo y se nos entrega el ritual y las leyes de la orden, insinuando un camino de trabajo y superación.

 

En el templo encontraremos el macrocosmos y el microcosmos, representando mucho más de lo que vemos. La alegoría de las tres grandes luces de la masonería se ubica en el ara. Está constituida por la escuadra, el compás sobre el volumen de la ley sagrada. Representa al hombre en su conjunto, cuerpo y alma, dominados por el cuerpo aun, sobre las leyes que gobiernan el universo. A su vez el conjunto está conectado a la estrella de 6 puntas, formada por los dos triángulos equiláteros, azul y rojo, que representa al G:.A:.D:.U:. que desciende al iniciado por medio de la luz que lo ilumina cuando los trabajos están abiertos. Esta luz representa la escala de Jacob, que une cielo y tierra, a su vez se reproduce en el cuerpo humano en la columna que une a la cabeza con el cuerpo.  Es decir a la parte pensante que gobierna o rige al vehículo.  De alguna manera, encierra un significado que se expresa más cuanto más se medita en ello.

También encontramos el número 3 en las velas que rodean al ara, con una zona septentrional que requiere más iluminación para apoyar el desarrollo del iniciado. Esto representa la necesidad de que los maestros enseñen a los aprendices.

Encontramos un total de 10 luces, sumando las 3 del ara, las 3 del Venerable Maestro, las 3 del Segundo Vigilante y la singular luz del Primer Vigilante. Estos 10 expresan mucho como conjunto, pero en su distribución, nos indica que el trabajo del aprendiz se da en el plano físico, llamado plano de la belleza.

Si analizamos los signos zodiacales, el aprendiz se inicia en Aries, donde el macho cabrío embiste a un guerrero derribándolo en un primer plano, en un segundo plano se aprecia a una mujer vendada con una vela que debiera alumbrar su camino en paradoja que muestra nuestro estado al iniciarnos. Luego tenemos a Tauro, que nos muestra la pasividad la inercia que debemos vencer. Finalmente tenemos a Géminis que nos enseña que para culminar nuestro viaje en el grado debemos lograr el equilibrio de los pares opuestos, simbolizados en la posición que asumimos entre columnas, en el hermafrodita que significa la unión de los sexos y los polos en un equilibrio espiritual, que refleja al tercer punto sobre la polaridad física y que es la conciencia, el ojo siempre mirando, la divinidad en la carne, que todos somos en realidad.

La liturgia del grado nos enseña como son los procesos mediante los cuales podemos llegar a nuestro yo interior y los cuidados que debemos tener para lograr la austera disciplina de los cuerpos físicos, astral y mental, trabajo del masón en toda su existencia.

Este ritual encierra a todos los rituales y es la base estructural sobre la que los demás se soportan. Entender la ritualística de la apertura, del cierre, así como los juramentos y oraciones, implica un avance importante en el camino masónico, pues representa nuestra existencia, nuestra devoción interna, nuestra evolución.

Finalmente hermanos míos, las DD:.y OO:.de una logia representan nuestros distintos órganos, la organización del universo y los pasos que debemos dar. Nos insinúa un conocimiento milenario que luego aprenderemos en el estudio del árbol de la vida bíblico, del que se dice que abrió los ojos de Adan, al comer su fruto, simbolizando al hombre en su período de darse cuenta.

Sí hermanos míos, encontraremos símbolos y alegorías en las escrituras, en los rituales, en las leyes, etc. Debemos disponernos a permitir que la Masonería nos renueve y no pasemos por ella sino dejemos que ella nos llene y a través de su camino gradual lleguemos a cumplir nuestro destino en esta vida, preparándonos para un futuro donde la virtud instaure ese reino de los cielos que se nos ofrece en el espíritu.

 

Seremos verdaderos hijos de la luz, cuando podamos llevar la verdad que encontraremos a nuestra vida cotidiana y sepamos levantar altares a la virtud en cada acción que emprendamos, en nuestra familia, educando a nuestros hijos, amorosamente con nuestra compañera, compartiendo en nuestro trabajo, fraternalmente con nuestros hermanos, en fin, en cada faceta de nuestra vida, haciendo realidad lo que reza cierta oración y nuestro ritual.

  

Comentarios

Entradas populares de este blog

INTERPRETACION DE LA PIEDRA CUBICA DE PUNTA

EL SIGNIFICADO DE LA COLUMNA “B”.

EL DEL APRENDIZ MASON Y LOS TRES PRIMEROS SIGNOS ZODIACALES. ZODIACO